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Una nueva generación de boinas verdes se suma a las filas del Escuadrón de Zapadores Paracaidista

7/6/2021

La boina verde es el elemento diferenciador por excelencia de los militares de operaciones especiales en las Fuerzas Armadas. Hacerse acreedor de una de estas prendas de cabeza no es tarea sencilla, lo cual no es de extrañar, ya que para portarla orgulloso es necesario antes pasar por un durísimo y selectivo plan de instrucción.

La unidad de operaciones especiales del Ejército del Aire, el Escuadrón de Zapadores Paracaidista (EZAPAC), está de enhorabuena, ya que ha tenido lugar en la base aérea de Alcantarilla, su sede, el acto de entrega de boinas verdes al personal de la unidad que ha superado el plan de instrucción. El acto ha sido presidido por el general de división José Luis Figuero Aguilar, paracaidista más antiguo en activo del Ejército de Aire, acompañado por el jefe del EZAPAC, teniente coronel Juan José Arbolí Nevot.

Quince han sido los miembros del EZAPAC que han superado este exigente y selectivo plan de instrucción, con una duración total de treinta y cuatro semanas en sus diferentes fases. Debido a la dureza del mismo, tanto a nivel físico, como psicológico, sólo lo culminan tres de cada diez personas que lo inician. Una vez superado, les abre las puertas para formar parte de los equipos operativos del EZAPAC, y desarrollar dentro de éstos los cometidos de operaciones especiales y de integración aire-suelo.

La imposición de la boina verde al personal perteneciente al EZAPAC se realiza una vez al año desde 1997, año en el que se produjo el cambio de boina negra por la boina de color verde.

Orígenes del EZAPAC

Con su lema por bandera, 'Sólo merece vivir quién por un noble ideal está dispuesto a morir', este escuadrón que tiene su génesis tras la finalización de la II Guerra Mundial cuando se crearon unidades aerotransportadas que fueran capaces de saltar más allá de las líneas enemigas. De este modo, en 1946 nació la Primera Bandera de la Legión de Tropas de Aviación, que se ubicó inicialmente en Alcalá de Henares (Madrid). Posteriormente, se creó como unidad independiente para denominarse, en 1947, Primera Bandera de Paracaidistas de Aviación. En 1953 tomó entidad de Primer Escuadrón de Paracaidistas, el cual tuvo su bautismo de fuego en la Guerra de Sidi-Ifni (1957-1958). En 1965 se disolvió para trasladarse a la base aérea de Alcantarilla (Murcia) como Escuadrilla de Zapadores Paracaidistas. En mayo de 2002 pasó a denominación de escuadrón. Esta nueva denominación de Escuadrón de Zapadores Paracaidistas le permitió mantener su conocido acrónimo de EZAPAC.

El Escuadrón de Zapadores Paracaidistas puede presumir de su palmarés de logros y récords, además de ser unidad pionera del paracaidismo de alta cota en España, aún conserva el récord de altura de lanzamiento establecido desde globo aerostático, en 1997 a 38 500 pies (12 kilómetros). También se encuentra en posesión del récord de distancia con paracaídas abierto, recorriendo una distancia de 50 kilómetros en modalidad HAHO (High Altitude High Opening). Con cerca de 200 000 lanzamientos colectivos en total realizados por personal de esta emblemática unidad, también destaca por su amplia experiencia, conocimientos y preparación.

Dentro de las operaciones especiales, el EZAPAC es la unidad especialista en la integración del poder aeroespacial con las operaciones en superficie y, en ese sentido, destacan entre sus cometidos los que implican el empleo de medios aéreos para la inserción y en el área de objetivos.