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El pasado 26 de mayo, la plaza de armas principal del Escuadrón de Apoyo al Despliegue Aéreo en la base aérea de Zaragoza albergó un sentido homenaje en recuerdo de todos los fallecidos en el accidente del avión Yak 42 en 2003.
Junto a los efectivos del EADA, también el Ala 31 realizó en sus instalaciones un solemne recuerdo a todos aquellos militares muertos en la que ha sido la peor tragedia del Ejército español en toda su historia en tiempo de paz. Juntos vivieron de manera muy especial el recuerdo por el 18º aniversario de aquel accidente en el que perdieron la vida 62 militares españoles, cuando viajaban de vuelta a casa después de una misión de cuatro meses en Afganistán. Junto a ellos también perecieron doce tripulantes ucranianos y un ciudadano bielorruso.
Aquella tragedia tocó muy de cerca a las unidades establecidas en la base aérea de Zaragoza. El Ala 31 perdió a nueve de sus compañeros y el Escuadrón de Apoyo al Despliegue Aéreo vio perecer a doce de sus camaradas entre aquellos sesenta y dos fallecidos. En los 27 años de existencia del EADA, la misión más intensa fue la de Afganistán, donde estuvieron 13 años seguidos y fue la unidad de la OTAN que más tiempo pasó allí en esa campaña.